Mario Sandoval se ha convertido en uno de los indispensables de la cocina Española. A través de su restaurante Coque (en Humanes), se ha sumado a la iniciativa Keep Walking Project, www.keepwalkingproject.com, que promueve el progreso personal, proporcionando apoyo a personas anónimas que quieran dar un paso adelante de la mano de grandes profesionales como él.
Texto Patricia Hervías fotos: Elsa Gallego
Con una estrella Michelin en su haber, Mario Sandoval continúa su imparable proyección en la gastronomía internacional. Gran parte de la “culpa” la tiene su abuelo Coque (que da nombre a su restaurante), que en el año 1947 abría en la localidad de Humanes (Madrid) el primer restaurante de la familia. Gracias al abuelo... y a la vida de su familia entre fogones, aquel niño conocería mejor la cocina mejor que a sí mismo. Se ha formado con los mejores (Martin Berasategui, Juan Mari Arzak o Ferran Adrià). De esta manera ha ido acumulando experiencia y galardones, como el primer premio del “IX Campeonato de Cocina de España”, en 2004, el primer premio en el “VI Certamen Nacional de Gastronomía”, en 2003, o la ya mencionada estrella Michelin.
Ahora se ha sumado a la iniciativa Keep Walking Project (www.keepwalkingproject.com), que promueve una conocida marca de espirituosos para incentivar el progreso personal, proporcionando apoyo a personas anónimas.
-¿La cocina es como un viaje para ti?
Exactamente la cocina es viajera. Te hace recordar, emocionarte, es un cúmulo de sorpresas y sensaciones que vas guardando con la experiencia y el paso de los años.
-Imagino que viajaras por razones de trabajo.
¿Consigues sacar tiempo para poder conocer el lugar dónde estás?
Siempre que viajo me intereso por la ciudad que visito y me encanta ir a los mercados centrales, porque para mi dice mucho de las personas que viven en el lugar y de cómo se alimentan.
-¿Te inspiras en esos países para crear? ¿Qué influencias hay en tu cocina?
En todos los viajes que he hecho siempre quedan recuerdos y matices en mi cocina, ahora recientemente he estado en Egipto, Estambul, Bangkok, y en mi cocina están presentes sus especias y aromas de las diferentes ciudades.
-Para ti, ¿viajar es un placer?
Para mi sí es un placer, porque los viajes te enseñan a entender mejor la vida y a verla de otro manera.
-De todos los lugares en los que has estado, ¿cuál ha sido el que más te ha llegado al corazón?
Tokio, por su cultura y su nivel gastronómico.
-¿Te mimetizas con la gente de los lugares que visitas?
Me encanta mimetizarme, porque es cuando verdaderamente disfrutas de la ciudad que visitas y entiendes su cultura.
- El nombre Keep Walking Project suena en sí mismo a viaje. ¿Qué supone para ti colaborar en este proyecto?
Para mi ha supuesto un viaje desde mi infancia hasta ahora. He recorrido todas las vivencias y los momentos de mi carrera profesional como chef de restaurante Coque, para mi ha sido muy constructivo hacer esa retrospección para seguir avanzando.
-¿Eres de los que come de todo?
Claro, me gustar probar todo tipo de alimentos para sacar mi propia conclusión.
-¿Te gusta la aventura?
Sí, soy muy aventurero. Pero me encantaría poder ir a un safari en África.
-Siempre existe un lugar al que soñamos con ir, ¿tu?
Me encantaría conocer Sydney, en Australia.
-¿Dejas amigos en cada viaje?
Siempre hago amistad con las personas que coincido. En los viajes y les doy mi contacto para cosas que puedan surgir en el futuro.
-¿Traes algo de cada viaje? ¿Y a los demás?
Suelo traer especias. A los demás, recuerdos de los sitios donde estuve.
-¿Un imprescindible para viajar?
Teléfono móvil.
-¿Qué lugar recomendarías a nuestros lectores?
Tokio, Japón.
-¿Un lugar dónde te gustaría ir a desenchufarte del mundo?
El cañón del colorado.
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